Son muchos los estudios que nos hablan del efecto positivo que tiene saber gestionar nuestras emociones sobre nuestra salud.

A lo largo de estos días he ido compartiendo con vosotros algunos ejercicios en formato vídeo, uno de ellos era justamente “para qué escribir un diario emocional”. Te dejaré el enlace al final del artículo; antes quiero daros pautas para que podáis hacer ese diario.

  1. Elige tu momento. Si es posible al finalizar el día para dedicarte un tiempo a ti, a tu salud emocional y física. 
  2. Busca un lugar tranquilo, donde tengas intimidad y te sientas cómodo, relajado, “tu templo”. 
  3. Elige un cuaderno, libreta o diario con ilusión y cariño porque va a ser donde vuelques tu esencia.
  4. Tomate unos instantes y dedícalos a recordar cuales han sido los momentos más intensos de tu día. Donde más emociones has sentido, pueden ser de alegría, de sorpresa, de tristeza, de rabia…Ve a ese momento y cuando los tengas identificados en tu mente ve al origen de todo.
  5. Ahora reflexiona sobre las siguientes preguntas:

¿Qué pensamientos, palabras (tuyas o de otro) hubieron?

¿Cómo te hizo sentir esa frase, pensamientos, palabras…?

¿Qué hiciste al sentir eso?

¿Cuál fue el resultado de ello?

Igual puede ayudarte este ejemplo al que llegó mi mente anoche cuando escribí mi diario:

“Estoy agotada, necesito descansar, tengo que empezar a cuidarme o mi intestino seguirá inflamándose ya me duele hoy mucho. Pero si estoy cuidando la dieta. Pero claro el estrés de la situación me está generando no parar…”. Ahí estaba yo dándole vueltas, “rumiando pensamientos en bucle” que no me dejaban clarificar todo…y llegué a entenderlo cuando me senté sobre mi diario y respondí a esas preguntas.

  • ¿Qué pensamientos, palabras (tuyas o de otro) hubieron?

Si no me esfuerzo intensamente perderé el trabajo (pensamiento mio)

  • ¿Cómo te hizo sentir esa frase, pensamientos, palabras…?

Me asusté, sentí inseguridad

  • ¿Qué hiciste al sentir eso?

Ante esa inseguridad aumenté el ritmo de trabajo dejando de hacer el yoga y descansos

  • ¿Cuál fue el resultado de ello?

Estrés emocional, dolor del intestino y mucho agotamiento. Me sentí cansada, triste y pensé que ya había pasado por ello antes…

Fui a mi diario emocional, y revisé situaciones similares, en otras lo que había escrito fue:

  • Pensamiento: «hago lo que puedo cada día, valorando mi trabajo y capacidad»
  • Sentimiento: «satisfacción, merecimiento, serenidad«
  • Acción: «respeto mis horarios de trabajo, comida, yoga y ocio«
  • Resultado: «me siento serena, equilibrada y mi intestino no sufre al no sufrir yo emocionalmente».

Todos, en nuestro día a día, tenemos pensamientos que generan emociones y solo cuando sepamos identificar como los gestionamos (acción) y el resultado que eso tiene, podré comenzar a gestionar esas emociones para mi bienestar físico y emocional.

Te animo a que comiences tu diario emocional y aprendas a identificar tus pensamientos, los que generan tus emociones y así poder gestionar tu día a día de una forma sana!.

Aquí os dejo el vídeo del que os hablaba donde os cuento el sentido del «para qué» más puedo usar este diario.Espero que os sea tan útil como a mi.

Suscribete al boletín de noticias de Com-partiendo.

Mantente al día de todos los recursos de ayuda de com-partiendo.es

¡Gracias por suscribirte a mi boletín informativo!

Suscribete al boletín de noticias de Com-partiendo.

Mantente al día de todos los recursos de ayuda de com-partiendo.es

¡Gracias por suscribirte a mi boletín informativo!